vividos, viajados o sencillamente imaginados






martes, 21 de diciembre de 2010

el frío y el deseo

Hace ya tiempo que el Támesis no se hiela como en la primera vida de Orlando, en aquel XVI de la reina virgen. Lo del proceso de calentamiento de la tierra y el cambio climático no es cuestión de hace dos días. Y por si hubiese duda la paradoja ayuda este año: la isla cubierta de nieve hasta la orilla del mar. Lo que tal vez haya cambiado es el pulso del deseo ¿estaríamos hoy dispuestos a esparcir nuestro calor apasionado sobre la efímera lámina del río? (¿y hoy, solsticio de invierno?)







"En vez de dirigirse a Londres , tomaban el camino contrario y erraban más allá del gentío por las heladas extensiones del Támesis, donde no daban con un alma viviente, salvo unos pájaros marinos o alguna vieja aldeana hachando el hielo con el vano propósito de sacar una baldada de agua (...) De ahí que Orlando y Sasha (...) de ahí, decimos, que tuvieran el río para ellos solos. Acalorados de patinar y de amor se tiraban en alguna playa solitaria, donde los amarillos mimbrales bordeaban la ribera y, envuelto en un gran manto de pieles, Orlando la tomaba en sus brazos y conocía por primera vez, murmuraba, los goces del amor. Luego, cumplido el éxtasis y aquietados los dos sobre la nieve, él le contaba de sus otros amores, y cómo, comparados con el de ella, habían sido de madera, de lona y de cenizas. (...) Y se maravillaban de que el hielo no se derritiera con su calor (...) Y después, embozados en sus martas, hablaban de cuanto hay bajo el sol: de vistas y viajes; de moros y paganos; de la barba de ese hombre y del cutis de esa mujer, de una rata que comía de su mano en la mesa; de las tapicerías de Arrás que se agitaban siempre en la cámara de su casa; de una cara, de una pluma. Nada era demasiado pequeño para ese diálogo, nada demasiado grande".

Virginia Woolf, Orlando

4 comentarios:

el zurdo dijo...

Hermosa entrada toda ella, tanto lo propio como lo ajeno hecho propio.

rubén dijo...

Propósito de Año Nuevo: leer Orlando. La foto, de vértigo.

Anónimo dijo...

El frio y el deseo que sugerente....

paisajescritos dijo...

Gracias por los tres puntos. El título era inevitable. Tardé en lograr la foto que ilustrase mi pasaje preferido de Orlando (3 de diciembre, horas antes del famoso cierre de los aeropuertos españoles, camino de Heathrow (por suerte abierto, no como Gatwich).
En fin, que 2011 no sea peor que el 2010. Desear ésto es desear mucho.