vividos, viajados o sencillamente imaginados






miércoles, 11 de agosto de 2010

momentos musicales









"Palencia... una calle larga.
A un lado, la catedral,
y debajo hay otra iglesia
que dicen del siglo tal".

Gloria Fuertes

"y el Cristo de las Claras, que queda más allá", digo yo. Lo olvidó o no llegó. Ese Cristo yacente mirado por Unamuno, Cristo casi inocente, cantando jondo desde su exagerada morbidez, más momia que recién muerto.

Y las calles del recuerdo a Jorge Manrique y sus coplas a orillas del Carrión, y a Pedro Berruguete y a sus santos con las letras de sus oraciones y cánticos dibujadas desde sus labios.






Palencia ... también el "Club 38", casi de mi quinta, donde la música se sirve a la carta y la bebida es menú del día. Aquí son otros los recuerdos, en un viaje que pasó de The Cure a Los Ángeles, por medio de mis Bee Gees adorados, hacia una despedida con banda sonora de Nino Rota. Antes Kate Bush había clamado por su amante entre cumbres borrascosas y P. J. Harvey había renacido como fantasma de Emily Dickinson.

Y la música de una victoria con hambre entre gritos y risas desafinados que ponen fechas -piques de especialistas- a cada fachada de la Plaza Mayor.


Todos, tantos, recuerdos musicados de Palencia.