Fernando. Ni siquiera la tienda de máscaras donde Stanley Kubrick encargó las de Eye Wild Shut. Fue este escaparate que me hizo acordarme de tí. Al buscar las imágenes para la entrada anterior volví a verla. Tras leer tu comentario no he tenido más remedio que reconocer este recuerdo y este guiño mientras disparaba.
2 comentarios:
Me trae recuerdos de mi etapa neurasténica en LA MODE, cuando me daba por salir con careta a la primera de cambio, en plan Phantom of the Operadise.
Dónde estás?
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